Resiliencia.
Esta palabra fue recogida por la psicología desde la ingeniería. En ésta hace referencia a la capacidad de los metales para regresar a un estado anterior, en cambio, la psicología lo utiliza para denominar la capacidad de recuperarse de situaciones adversas.
Cuando trabajé en algunas fundaciones con niños en riesgo social poníamos énfasis en un mayor desarrollo de la resiliencia, la idea era que ellos pudieran superar la adversidad y salir adelante. No es mi intención referirme a ese voluntariado, sino que a la resiliencia en mí. Estos días no ha sido muy buenos, o al menos no me he sentido muy bien. El estado que ha predominado es una mezcla de hastío, melancolía y pena.
Hastío por todo, ganas de no saber de nada ni de nadie, sino que sólo querer existir, sin percibir ni ser percibido. Melancolía por la soledad, querer estar con alguien, me siento con ganas de querer, con ganas de estar con una persona especial, a quien abrazar, a quien acompañar, quien me abrace cuando me sienta como estoy ahora, sin decirnos nada, sólo que me acoja, que el diálogo sea únicamente físico, que estemos acostaditos sientiéndonos, animándonos de ese modo, eso quiero. Y eso quería el sábado cuando me sentía mal, cuando extrañaba, cuando me sentía torpe, estúpidamente estúpido, así que finalmente hice justamente aquello que un amigo me dijo que nunca hiciera: llorar escondido en los rincones, con la espera de que alguien me abrazar, que me escuchara, que estuviera ahí, sólo eso.
Pena también porque se vienen 'duelos', cierres y ya empecé algunos. La semana pasada le dije a Matías que ya era tiempo de terminar, sé que eso puede durar unos meses y en septiembre me voy por un tiempo, por ello es mejor hacerlo ahora. Fue una buena experiencia, aprendí bastante, fueron largas conversaciones, sentimientos por montones, fue especial. Aún recuerdo esos momentos en los que le confesé mis secretos más íntimos, y sólo me escuchaba. Cuántas veces he recurrido a esas conversaciones, muchas, sin duda.
Pero finalmente me digo, ¿si no me doy ánimo yo, quién me lo va dar?. La vida sigue, y hay que ponerle no nos queda otra. Lo menos que quiero es que esos sentimientos me ganen que me sienta vencido por ellos. Y pienso en lo que le decía a los niños, que ellos podían hacer lo que quisieran si se lo proponían, que todo depende de la voluntad de uno, si ustedes quieren van a lograr todo. Todo está en ustedes. Ahora todo depende de mí, de querer, de querer estar mejor. Hoy quiero estar mejor, y lo voy a estar.
Un abrazo.
Cuando trabajé en algunas fundaciones con niños en riesgo social poníamos énfasis en un mayor desarrollo de la resiliencia, la idea era que ellos pudieran superar la adversidad y salir adelante. No es mi intención referirme a ese voluntariado, sino que a la resiliencia en mí. Estos días no ha sido muy buenos, o al menos no me he sentido muy bien. El estado que ha predominado es una mezcla de hastío, melancolía y pena.
Hastío por todo, ganas de no saber de nada ni de nadie, sino que sólo querer existir, sin percibir ni ser percibido. Melancolía por la soledad, querer estar con alguien, me siento con ganas de querer, con ganas de estar con una persona especial, a quien abrazar, a quien acompañar, quien me abrace cuando me sienta como estoy ahora, sin decirnos nada, sólo que me acoja, que el diálogo sea únicamente físico, que estemos acostaditos sientiéndonos, animándonos de ese modo, eso quiero. Y eso quería el sábado cuando me sentía mal, cuando extrañaba, cuando me sentía torpe, estúpidamente estúpido, así que finalmente hice justamente aquello que un amigo me dijo que nunca hiciera: llorar escondido en los rincones, con la espera de que alguien me abrazar, que me escuchara, que estuviera ahí, sólo eso.
Pena también porque se vienen 'duelos', cierres y ya empecé algunos. La semana pasada le dije a Matías que ya era tiempo de terminar, sé que eso puede durar unos meses y en septiembre me voy por un tiempo, por ello es mejor hacerlo ahora. Fue una buena experiencia, aprendí bastante, fueron largas conversaciones, sentimientos por montones, fue especial. Aún recuerdo esos momentos en los que le confesé mis secretos más íntimos, y sólo me escuchaba. Cuántas veces he recurrido a esas conversaciones, muchas, sin duda.
Pero finalmente me digo, ¿si no me doy ánimo yo, quién me lo va dar?. La vida sigue, y hay que ponerle no nos queda otra. Lo menos que quiero es que esos sentimientos me ganen que me sienta vencido por ellos. Y pienso en lo que le decía a los niños, que ellos podían hacer lo que quisieran si se lo proponían, que todo depende de la voluntad de uno, si ustedes quieren van a lograr todo. Todo está en ustedes. Ahora todo depende de mí, de querer, de querer estar mejor. Hoy quiero estar mejor, y lo voy a estar.
Un abrazo.
Comentarios
lo primero es decidir estar bien..
despues todo se hace mas facil
abrazos
Decir hasta aquì llegò o hasta aquì soporto. Super buena decisiòn. Cerrar ciclos e iniciar otros es sano.
Cariños
x0x0x0x
LaRomanè
PD_ que manera de ocupar la resilencia en mi vida, asi como el Ave Phoenix...renacer de las cenizas.
Saludos
SEBASTIAN DQ.
Ser resiliente no es fácil, implica primero partir desde la dificultad a sobrepasar o el escollo a superar, implica, aceptarlo, asumirlo, pero más que nada conocerlo .... no se puede ser resiliente sin "conocer al enemigo", por decirlo de algún modo. Ya sabes a que te enfrentas, que es lo que tienes delante, ahora sólo falta que encuentres dentro de ti ese pedacito de "niño resiliente" que todos tenemos dentro.
No dudo que vas a lograrlo, que tendrás éxito en tu tarea, y no dejes de pensar que no es necesario que resulte a la primera ni que será fácil, dáte la oportunidad y el permiso para intentarlo y volver a empezar cuantas veces sea necesario. Recuerda que los círculos se cierran sólo a su debido tiempo y al ritmo particular de cada uno.
Un abrazo inmenso, todo mi cariño y ánimo para ti ... y un poco de fuerza para sacar desde ti toda la resiliencia necesaria.
Besos y abrazos!!!!!
Resulta que cuando todo anda mal,me la lloriqueo un poco y como un aaaaaaguilaaaaaaaaaaaaaaaaaaa vuelvo a volar...
Está en tí
Está en mí y en cada uno
esa maravillosa capacidad de decir...
EStoy vivo ¡¡¡ asi es que mejor, me dejo de tonteras ...
Un besote
Partiste como caballo de feria...todo bajoneado y despues sentí casi una sonrisa.....onda el arcoiris despues de la tormenta...
muy buen post.....como q a todos nos da la huea de vez en cuanto y no tenemos los cojones de enfrentar los dramas...cuando te vayas será un ciclo de verdad nuevo y cuando vuelvas (si es q vuelves) otro y no tendras q lidiar con cosas inconclusas.
Exito!
Creo que hay que darse tiempo para estar mal tambien, pero sin que se haga costumbre.
No compro eso de creerse un superheroe.
Abrazo
no sirve de nada que te diga que millones de veces me he sentido asi.
mucho ánimo y fuerza!
Tal vez un bear hug sirva,
Eleu
Dato rosa jejeje